jueves, 24 de noviembre de 2011

Música


 
Cuando el silencio estremece,
cuando todo alrededor es frío,
cuando el ayer no desaparece,
busco en ti un cálido refugio.

Pintas de púrpura la luna nueva,
te disfrazas de cielo y llueve ternura,
llenas de lunas la noche muerta,
tiñes los temores de dulce sonrisa.

A menudo te acompaño,
torpe, pero a tu lado.

A menudo te hablo,
y siempre contestas, con descaro.

¿Cómo sería todo sin tu furia,
que haría sin tu compañía,
cuanta magia has regalado,
cuanta noche jamás podría acariciar su día?

Ahora te estoy escuchando.
Has templado el agua fría.
Quiero decirte, que sin ti, a mi lado,
nunca habría soñado esta poesía.


Otoño 1995


¿Que habría sido de mi sin The Clash, Velvet Undergroung o Bob Marley?

Música, ¡¡¡que gran compañera¡¡¡. Sin pedir nada a cambio comparte momentos inolvidables de nuestra vida.

jueves, 17 de noviembre de 2011

Mirando al horizonte


 
Me quedé inmóvil mirando al horizonte,
imaginando campos bordados de sueños,
tenues sonrisas de labios sensuales,
amigos con brazos abiertos,
árboles de frutos salvajes,
manos que saben acariciar,
dibujos de mil colores,
música que seda la tormenta,
unos ojos expresando verdad,
una madre contemplando a su hijo,
animales disfrutando en libertad,
sabor a dulce manjar,
olor a savia de árbol iluminado.

No existe juego más placentero,
que mirar al horizonte, soñando,
con los ojos cerrados.

Invierno 1994


Mirar al futuro, sin pensar apenas en él, pero permitiendo que nos abrace, es una buena medicina que nos ayuda a borrar las incertidumbres y miedos de lo que queda por venir.

jueves, 10 de noviembre de 2011

Dinero

Palabra de falso metal,
papel de árbol carcomido,
no eres cuerda, sino hilo,
de donde pende la lealtad.

Sonríes a la mentira,
del necesitado, te escondes,
el éxito es tu reflejo,
reflejo de lodos, de tiranía.

Separas vidas encontradas,
levantas infinitas barreras,
llenas bocas de la nada,
impones leyes sin palabra.

Uno es para tontos,
diez, ¿sólo diez?,
cien mas bien poco,
mil, no me conformo.

Sombra de guerras,
cuna de odios,
escuela de mentiras,
Dios de poderosos.

Otoño 1994

Que el dinero separa vidas es algo muy común en nuestro privilegiado primer mundo debido a ácidas envidias, ambiciones artificiales o traiciones milimetradas.

Más triste, incluso, me han parecido siempre, las ocasiones en que el dinero llega a juntar vidas. Es un síntoma claro de una gran enfermedad social.

Por cierto, ahora me doy cuenta de que en 1994 ya era un “indignado”...

jueves, 3 de noviembre de 2011

Febrero

Lunes, me mareo;
Martes un fantasma;
Miércoles, sospechoso;
Jueves caso abierto;
Viernes, todo al blanco;
Sábado todo al negro;
Domingo, ya no juego.

Lunes, de rotonda;
Martes, ¡a sus puestos¡;
Miércoles, de registro;
Jueves, no hay recreo;
Viernes akelarre;
Sábado, casi sexo;
Domingo, ¿fue un sueño?.

Lunes, hoja en blanco;
Martes de muestreo;
Miércoles, un jilguero;
Jueves siempre en medio;
Viernes me lo pienso;
Sábado, busco y no encuentro;
Domingo, sin teléfono.

Lunes, pasajero;
Martes, disparate;
Miércoles, de hielo;
Jueves, ahora vuelvo;
Viernes, con lo puesto;
Sábado, un juguete;
Domingo, la pregunta: ¿Soy bisiesto?


Invierno 1994


Febrero es la muchacha con aparato bucal que se sienta en una  esquina del fondo de la clase para pasar eternamente desapercibida.

Aún y así lo necesitamos para jugar con él y arreglar los desajustes del calendario.

Febrero es el mes del desconcierto. Siempre me generó curiosidad.